Washington/Nueva York/Madrid. (Agencias).- La fuerte tormenta de nieve y hielo que afecta a un tercio de Estados Unidos esta semana se acerca a Chicago y allí podría sumar hasta diez centímetros de nieve por hora, advirtieron meteorólogos estadounidenses.
La ciudad ya sufre desde esta pasada noche vientos de 80 kilómetros por hora y sus calles están vacías. Según el servicio meteorológico nacional, es una de las peores tormentas de las últimas décadas.
La colosal tormenta afecta a un tercio del país, desde el suroeste hasta la costa Atlántica. Incluso en la sureña Texas las calles estaban llenas de hielo y las temperaturas eran mínimas y en Chicago fueron cerrados los colegios, por primera vez en más de una década. La situacióne s tal que en algunos estados, como en Missouri, Illinois y Kansas se ha declarado el estado de emergencia.La tormenta podría afectar a 100 millones de personas, entre accidentes, ciudadanos que han perdido sus vuelos, se han quedado atascados en las calles sin poder acudir a su lugar de trabajo, según informa el sitio Weather.com.
En España los efectos de la tormenta han obligado a cancelar en el aeropuerto de Barajas tres vuelos con Nueva York (2) y con Chicago, han informado fuentes de AENA y de las compañías aéreas.
Se trata de dos vuelos procedentes de Nueva York, de las compañías American Airlines y Continental, y de una ruta de Iberia a Chicago.
La compañía española ha anunciado que tiene previsto operar su vuelo a Nueva York, que ayer fue cancelado, ya que la situación está mejorando en este aeropuerto, pero tiene que anular el que se dirige a Chicago porque es donde se concentran hoy los problemas.
Según los datos de la página web FlightAware.com la tormenta provocó ayer la cancelación de 6.500 vuelos en Estados Unidos y se prevé hoy la suspensión de otros 3.600 como medida de precaución.
La nave espacial WISE (Wide-field Infrared Survey Explorer) acaba de concluir su misión "NeoWISE" de búsqueda de objetos en el Sistema Solar. Y con unos resultados realmente espectaculares. Veinte nuevos cometas, más de 33.000 asteroides desconocidos del cinturón rocoso que hay entre las órbitas de Marte y Júpiter y, lo que resulta algo más inquietante, 134 nuevos NEOs (objetos cercanos a la Tierra).
NeoWISE es una extensión de la misión primaria de este satélite de la NASA lanzado en diciembre de 2009. Durante su misión principal, WISE escaneó durante todo un año la cúpula celeste en el rango de los infrarrojos. En ese tiempo tomó más de 2.700.000 imágenes de toda clase de objetos en el espacio, desde galaxias lejanas a asteroides y cometas cerca de nuestro planeta.
A principios de octubre de 2010 y tras concluir su misión principal, la nave agotó la provisión del líquido refrigerante que mantiene fríos sus instrumentos, pero a pesar de ello dos de sus cuatro cámaras de infrarrojos siguieron operativas. Y la NASA decidió aprovechar la circunstancia para "cazar" asteroides y cometas durante otros cuatro meses más.
La nueva misión fue bautizada como NeoWISE y es la que acaba de concluir. Ahora, la nave será hibernada y permanecerá inactiva en su órbita polar hasta que vuelvan a necesitarse sus servicios.
153.000 cuerpos rocosos
Además de haber descubierto una gran cantidad de nuevos asteroides y cometas, NeoWISE ha confirmado también la presencia de una gran cantidad de objetos que ya habían sido detectados en el cinturón de asteroides. En apenas un año, sus cámaras observaron cerca de 153.000 cuerpos rocosos de los 500.000 que se conocen, además de los ya citados 33.000 nuevos.
Los datos de las observaciones de WISE serán fundamentales para determinar el tamaño y la composición de miles de objetos de nuestro Sistema Solar. De hecho, los estudios anteriores realizados con luz visible sólo revelan la cantidad de luz solar que es capaz de reflejar un asteroide, mientras que los datos infrarrojos pueden decirnos mucho más sobre su tamaño real.
Combinando los datos obtenidos de luz visible e infrarrojos, los astrónomos pueden, además, llegar a conocer la composición de las rocas espaciales que nos rodean.
Pero aún hay más. Si se combinan los datos de las observaciones de WISE con los de su misión extendida NeoWISE, será posible también averiguar si en las cercanías se esconde, o no, alguna oscura enana marrón, incluso si estuviera más cerca de nosotros que la estrella más cercana conocida, Próxima Centauri, que está a algo más de cuatro años luz de la Tierra. Y también será posible averiguar si existe, en las fronteras exteriores de nuestro sistema, algún otro gran planeta hasta ahora indetectado.
Para conocer esta clase de datos, sin embargo, habrá que esperar un tiempo. El primer "paquete" de información no se hará público hasta abril, y podría esconder más de una sorpresa.